Horas Tristes

Desplomada en el suelo como un inerte trapo
Hablándole a él, ese que le escucha todo el tiempo
Nunca se han visto, pero las palpitaciones cada vez se hacen más fuertes
Él calla, sabe que es la manera más sensata de pasar las horas, horas frías y turbias.

Ella se desgarra sacando todo el pesar que no duele 
Pero si viene su mente en esas horas tétricas y largas
Tan largas como el horizonte que ella ya no quiere ver,
Porque dejó de ser dulce y brisado como ella.

Le dice: -a toda hora me devora, ¿qué quiere que haga?
Sabemos que yo soy débil pero tampoco puedo dejarme recaer en su noble voluntad... Mejor ciérrame los párpados
Como haces bajo la lluvia y no me hables
Así cómo lo has hecho siempre pero confórtame de lejos
Que yo pueda ver tu sonrisa tan cálida.